
En una entrada del blog de Austin Kleon, leí que una vida en la que los episodios están divididos en pequeños pedacitos “más masticables” es una vida bien diseñada y sostenible.
Imagina que vives tu vida de nuevo, pero en bloques que no están divididos en pequeños pedacitos, sino en grandes bloques de eventos que pertenecen a una misma categoría, duermes por 30 años, te sientas en la taza del baño por 5 años o durante 7 meses lo único que haces es tener sexo.
Interesante ¿verdad?
Llevando el tema a mi propia vida, no me gusta trabajar 8 o 9 horas continuas sin levantarme de la silla en varios momentos para estirarme, me gusta dividir el trabajo en bloques más pequeños y más manejables.
A la semana medio unos 210 minutos, que por supuesto que no me gustaría hacerlos de un tirón.
Lo mismo sucede con el tiempo que otras actividades de mi día a día, como cocinar, dormir o dibujar.
Creo que cada uno de nosotros podemos decidir tener una vida variada y rica, dividida en bloques pequeños y manejables en la medida de nuestras posibilidades.
En vez de, por ejemplo, pasar el fin de semana entero sólo viendo series, para mí es mucho más sano y divertido dedicar tiempo a salir a caminar a un parque, a leer un libro, a conversar con alguien a quien aprecio, a escuchar música, a hacer un poco de ejercicio y a tomar una siesta.
De esa manera siento que aproveché mejor mi tiempo, y no, no se trata de llenar de cosas el día sólo por avidez, apego o adicción, se trata de darle matices y variedad a la propia vida, dejando espacio para sólo respirar y contemplar el techo.
-Juan